El Real Valladolid y la carrera por el ascenso más barata

La carrera por el ascenso a Primera División sigue ¡en la cabeza de  un Real Valladolid que, a pesar de los pesares, a pesar de las palabras poco convincentes de su entrenador, a pesar de la irregular marcha del equipo a lo largo de la temporada y a pesar del fútbol con cuentagotas que ha desplegado a lo largo de la presente campaña, sigue bien colocado y con todas las opciones de recuperar los galones de Primera arrancados a cuajo por su incapacidad la temporada pasada. 

Un Real Valladolid ramplón e incluso un tanto conformista en muchas fase de la temporada a pesar de contar con el segundo mayor presupuesto de Segunda División, sigue a flote en buena parte gracias a que este año  la categoría de plata del fútbol español es posiblemente la más barata de los últimos años. Prueba de ello es que una vez consumidos dos tercios de competición, los dos equipos que marcan el ascenso directo, Leganés y Espanyol, con 50 y 47 puntos, han dejado escapar 34 y 37 puntos, respectivamente, de los 84 posibles tras 28 jornadas disputadas.

E l Real Valladolid, cuarto clasificado, a solo dos puntos del ascenso directo marcado por el segundo clasificado, Espanyol, ha dejado escapar 39 puntos, una barbaridad para un equipo que pretende el ascenso. Pero la Segunda División este año, se caracteriza por ser una competición igualada, quizás por la falta de músculo económico y calidad de sus contendientes como refleja el hecho de que del primero al séptimo equipos hay solo siete puntos de diferencia, una situación que nunca antes se había dado.  

El Real Valladolid, con una cara mejorada con las incorporaciones de César Tárrega, Stipe Biuk y Amath Ndiaye, jugadores sobre el tapete diferenciales, está obligado a mejorar las prestaciones de los dos primeros tercios de competición . Y es que cabe recordar que el equipo del criticado Paulo Pezzolano, casi cada día en el ojo del huracán  desde la temporada pasada cuando no fue capaz de salvar al equipo del descenso a Segunda, ha perdido fuelle en el segundo tercio de competición con respecto al primero, respecto a los primeros 14 partidos. 

Si en el primer tercio de Liga el Real Valladolid logró sumar 25 puntos fruto de 8 triunfos, 1 empate  y cinco derrotas con 17 goles a favor y 15 en contra, en e l segundo tercio de competición su productividad descendió cinco puntos, quedándose en 20 (5 victorias, 5 empates y 4 derrotas) con 15 goles a favor y 11 en contra. 

Un  rendimiento deportivo claramente decreciente que sin embargo  no le penalizó en la clasificación al mantener en ambos tramos de 14 partidos la cuarta plaza estando en ambos casos a la misma distancia del ascenso directo: dos puntos.

Cuatro de los seis primeros clasificados una vez cerrado el primer tercio de competición (Leganés, Espanyol, Eibar y Real Valladolid) se mantienen en tras consumirse el segundo tercio, la jornada 28. Sporting y Levante se han caído para dejar paso a Elche y Racing Ferrol. 

Los 45 puntos del Real Valladolid al paso por la jornada número 28 es la segunda peor puntuación en comparación con los anteriores ascensos del Real Valladolid a cargo de Mendilibar (temporada 06-07) Djukic (11-12) y Pacheta (21-22).

 

Solo la marca del Real Valladolid de Sergio González (17-18), con 42 puntos, fue peor a la del equipo de Pezzolano, aunque en su descarga aquel equipo, por entonces lo dirigía antes de ser destituido Luis César Sampedro.

Tras disputarse dos tercios de Liga el ascenso este año va camino de ser el más barato de los últimos años desde que se instaurara el playoff en la campaña 2011-2012.

Los 45 puntos del Real Valladolid le obligan ahora rearmado a hacer un gran sprint (7 partidos en casa y 7 fuera)  si pretende cuanto menos asegurar esos 67 puntos que le dieron la quinta plaza y posteriormente el ascenso al real Valladolid en la campaña 17-18. Porque los registros de Mendilibar (88), Djukic (82) y Pacheta (81), a día de hoy parecen inalcanzables.