FÚTBOL / REAL VALLADOLID
Real Valladolid, el nuevo rey del empate
El equipo de Pezzolano pasa de ser el equipo que menos iguala en las 22 primeras jornadas (2) a ser el que más lo hace en las últimas cinco (4) / Pezzolano prefiere asumir menos riesgos y no perder
Jornada 22 de Liga de Segunda División. La clasificación muestra una particularidad en su casillero de empates. El número de partidos con igualada de los equipos de la categoría oscila de forma consecutiva entre los 10 del Oviedo y los 4 del Tenerife.
El resto recorre la escala que media entre ellos. Con 9 están Sporting y Eldense. Con 8, Racing de Ferrol, Espanyol, Levante, Mirandés, Zaragoza y Huesca. Con 7, Albacete y Amorebieta. Con 6, Leganés, Racing de Santander, Burgos, Elche, Villarreal B, Alcorcón y Cartagena. Y con 5, Éibar y Andorra.
Pero existe un equipo que se sale de esta horquilla. Es el que falta. La excepción. El Real Valladolid. Suma sólo 2 empates, ante Elche y Leganés, ambos en Zorrilla.
En ese momento algo hace clic en la voluntad de Pezzolano y su vasto grupo de trabajo. Su equipo ha cosechado tres derrotas consecutivas y suma cuatro partidos perdidos de los últimos cinco. El otro lo ganó a última hora en casa ante el ahora colista Amorebieta.
Y entonces el entrenador uruguayo cambia de libreto. Salir, sobre todo a domicilio, al intercambio de golpes está resultando letal, de modo que hay que minimizar riesgos. De principio se busca la victoria, pero si se llega a un último cuarto en el que no parece factible ganar, se conserva el punto, aun sin renunciar a la sorpresa, mucho más difícil con el cinturón de seguridad puesto.
Nada nuevo en el planeta fútbol, donde uno de sus lemas conformistas es que no se pierda al final lo que no se ha podido ganar durante el resto del partido.
Y esta nueva concepción ha dado sus frutos. El Real Valladolid se ha transformado en las siguientes cinco jornadas en el rey del empate. Suma cuatro en cinco partidos, con la única excepción del triunfo en Zorrilla por 3-1 frente al Racing de Santander.
Solamente el Levante le aguanta ese ritmo del punto a punto con los mismos cuatro, pero con una derrota. Los demás van de las tres igualadas a una sola en este lapso.
Pasar del 9% de empates al 80% no es una casualidad sino un sesgo buscado. El problema es que con tres puntos por victoria, al Real Valladolid no le da para engancharse a la zona de ascenso directo. En su situación actual y con el porcentaje de puntos de sus rivales por los dos primeros puestos, ni siquiera la media inglesa (victoria en casa, empate fuera) le sirve. El conjunto de Pezzolano tiene aún a tiro la zona de ascenso directo y para hollarla hacen falta algo más que empates.