BALONMANO / LIGA GUERRERAS IBERDROLA
No hay quien pueda con un Caja Rural Aula vestido de líder
El equipo de Peñas, que reaparecía en el banquillo vallisoletano noquea al rocoso Porriño tras una portentosa exhibición física en la segunda mitad con un parcial de 16-7
La gota horada la roca y no por su fuerza sino por su constancia. La constancia de un Caja Rural Aula convertido en agua para acabar perforando al rocoso Porriño. El conjunto gallego, no faltando a su tradición en sus visitas a Huerta del Rey, fue un rival tremendamente incómodo para las vallisoletanas, que tuvieron que esperar a la segunda mitad para noquear a su fiero rival por desgaste, por constancia, por incordio...
Y es que si algo tiene este Aula es que no se descompone. Ni aunque no esté su primer entrenador como ocurrió en partidos anteriores por una intervención quirúrgica o porque vengan malas dadas, de inicio (solo de inicio con ese 1-4 de partida para ir a remolque durante toda la primera mitad) como ocurrió en el partido de ayer ante Porriño.
La autoconfianza del Aula es indestructible como se demostró ayer. Un equipo que no solo cuenta con un fondo de armario sin duda privilegiado, con recambios de garantía en cada puesto, ante Porriño con especial mención para portería, con Alicia Robles ejerciendo de flotador de su equipo en la segunda mitad y con una ya recuperada Lorena Téllez que cada día va a más tras su maternidad.
Fue un ejercicio, otro ejercicio más de paciencia, de saber esperar a que el ácido láctico se desbordara en su rival. Porque aguantar el ritmo de juego de las vallisoletanas a día de hoy está al alcance de pocos, muy pocos equipos en la Liga Guerreras Iberdrola. Porriño lo hizo, quizás de forma osada. Treinta minutos de un buen balonmano manteniendo a raya al sorprende líder de la Liga. Pero tras el descanso (14-15) llegó el desfondamiento coincidiendo con las paradas de Alicia Robles y la conexión con el contragolpe, el gran arma de las vallisoletanas.
Un parcial de 4-1 fue el principio del fin para las gallegas, desbordadas por la movilidad de su rival de izquierda a derecha. Poco a poco la brecha se fue ensanchando al tiempo que el Aula metía su sexta marcha al galope.
La oposición defensiva de las gallegas pasando a una 3-2-1 casi abierta buscando la reacción hizo el efecto contrario para acabar goleando el Aula hasta ese 30-22 final que les mantiene en la cabeza de la tabla, cabeza compartida con Bera Bera, Málaga y Elche con cuatro puntos ya de colchón con el quinto clasificado.