Un Real Valladolid bajo mínimos a horas del debut liguero

El término medio es un concepto poco trabajado en el Real Valladolid, en lo que a plantilla se refiere. Más que  el ajuste modulado, lo que prima en Zorrilla es lo de las plagas bíblicas. A épocas de vacas gordas les están sucediendo las de vacas flacas. 

Traducido al fútbol: el equipo que se ha pasado las dos últimas temp0radas quitándose jugadores de encima porque la cifra frisaba la cuarentena, se encuentra ahora con que están cuatro y el del tambor a un día del comienzo de la Liga.

El vacío existente en el equipo pucelano estremece, en vísperas de su debut ante el Sporting es propio de agujero negro. La cifra de fichas profesionales es de  20. No llega a dos jugadores por puesto. Pero a esta veintena hay que restar a dos jugadores que están ya fuera a falta de hacerse oficial su  marcha (El Yamiq y Kike), uno que saldrá, antes o después (Amallah), otros dos que no interesan y de los que se va a prescindir (Malsa y Narváez), otros dos a los que se quiere dar salida pero que se quedarán si no hay más remedio (Kenedy y Luis Pérez).

Visto el panorama, se cuenta con quince jugadores profesionales y, si hay suerte y se encuentra acomodo a los dos últimos, con trece. Y esto, sin contar con que Masip o sobre todo Asenjo pueden salir, si finalmente se queda Aceves.

Con doce fichas profesionales en el mejor de los casos, algunas como las de Rosa y Vallejo hechas para no superar el límite de filiales sobre el campo, Catoira se vería obligado a realizar en veinte días al menos seis o siete contrataciones, completando el resto de plantilla con el filial. Y todo con la espada de Damocles del límite salarial, que a día de hoy está superado con la actual plantilla. El director deportivo necesita deshacerse ya de piezas y firmar futbolistas con una ficha mucho más reducida. 

PORTERÍA. Masip es el elegido por Pezzolano y habrá que ver qué ocurre con Asenjo. Si ve que en estos tres partidos de agosto no juega podría buscar su salida, pero no le será fácil encontrar acomodo con su ficha. En el caso de que continúe, Aceves podría salir cedido, aunque está al nivel de los profesionales o incluso mejor.

DEFENSA. El técnico uruguayo cuenta para esta línea ante el Sporting con estos jugadores de ficha profesional: Luis Pérez, Rosa, Boyomo y Escudero. Dos laterales derechos, un central y un lateral izquierdo. Los refuerzos con ficha del filial son Fresneda (otro lateral diestro, que se irá a Barça o Chelsea),  Víctor (central) y Garri (lateral zurdo). Javi Sánchez está lesionado y El Yamiq en Arabia Saudí, pero oficialmente es aún jugador pucelano.  Torres, central con ficha del filial pero que se quedará en el primer equipo, está lesionado.

MEDIOCAMPO. Nada para elegir en el mediocentro. Monchu yDe la Hoz son fijos. Malsa no cuenta y está tocado. No ha jugado un minuto en pretemporada. Kike es casi del Rayo y Anuar afronta el final de su recuperación. Maroto, otro filial , puede entrar en la lista.

Los extremos también sufren la sequía propia de estas fechas. Moro y Vallejo (ayer inscrito) son los futbolistas con ficha profesional para e atraque por la banda derecha, mientras que Kenedy y Narváez son los ocupante de la izquierda. Ambos han sido testimoniales en pretemporada y lo más probable es que siga como titular Tunde, otro futbolista de filial que ha completado buena pretemporada.

ATAQUE. En la media punta están Amallah e Iván Sánchez.  El primero se irá, probablemente al Valencia, aunque su dueño ha parado las enteradas hasta que no haya más salidas. Pero hasta que lo haga, jugará.  Lo mismo cabe decir de Fresneda.

En punta sólo está como profesional Sergio León, a la espera de que Marcos André recorra el camino inverso de Amallah. Como ocurre con Tunde, el probable delantero centro es el filial Cédric, autor de seis de los nueve goles de pretemporada marcados por este Pucela más crudo que a medio hacer.