El Real Valladolid Baloncesto y los 14.000 kilómetros para llegar a la ACB

El Real Valladolid Baloncesto , con el valioso y gratificante refuerzo que supone la mayor implicación del club de fútbol, cuya intención a corto-medio plazo es insertar el basket como una sección más de su engranaje, va tomando forma bajo las manos del ‘arquitecto’ Pepe Catalina. El director deportivo sigue trabajando en la confección de una plantilla, por fin, con los mimbres para poder competir por el ascenso lejos de la quimera de años anteriores. 

Con un presupuesto más cerca de los llamados poderosos de la categoría como puedan ser los descendidos Real Betis, Fuenlabrada y los tres buques insignia de la categoría, liderados por el Estudiantes en su quizás última huida hacia adelante, seguido por San Pablo Burgos y Leyma Coruña, el UEMC Real Valladolid tiene casi todos los deberes hechos, algo que no pueden decir el resto de rivales.

A falta de una o dos piezas a ubicar  en el ‘necesitado’ juego interior, el equipo blanquivioleta, que en breve presentará sus revolucionarias nuevas equipaciones (la primera rayada como el equipo de fútbol y la segunda bicolor difuminándose un color, azul, en el otro, morado), espera con impaciencia el sorteo del calendario que tendrá lugar el próximo martes día 25 en la sede de la FEB.

La ‘Paconeta’  deberá recorrer un total de algo mas de 14.000 kilómetros para llegar a la codiciada ACB. Ese es el objetivo como dijo por primera vez y sin miedo Paco García en una entrevista a este periódico. 

Sin complejos, el nuevo UEMC Real Valladolid, reforzado en la batería exterior con el artillero ex Zunder Palencia Devin Schmidt, un jugador de calidad contrastada al que el pasado año no pudo acceder por una cuestión presupuestaria, las miras se dirigen a la posición más importante y a la postre determinante como es la del ‘cinco’. En este sentido el Real Valladolid Baloncesto rastrea el mercado en busca de un pívot determinante y que intimide en la ‘pintura’. Uno de los focos se ha dirigido al pívot del Leyma Coruña, Atoumane Diagne, un 2,15 metros salido de las categorías inferiores del FCBarcelona que en las dos últimas campañas ha rendido a un gran nivel en el conjunto coruñés.  

Pero la llegada de un ‘cinco’ no será la última incorporación del conjunto blanquivioleta, que buscará otro interior con un papel más secundario para las rotaciones, dejando la puerta abierta a la posible recuperación de Kabasele, tras su lesión de larga duración. Y es que cabe recordar que con los dos últimos cromos por pegar en el álbum que pujará por recuperar los galones ACB esta temporada, el UEMC Real Valladolid Baloncesto se guarda un as debajo de la manga de cara a futuras eventualidades ya que aún tendrá una plaza libre porque Juan García-Abril no ocupa ficha al estar vinculado al equipo filial de Primera Nacional que dirigirá un año más David Enciso, jefe de cantera.