El VRAC asalta La Cartuja y se cuela en la gran final copera

Cinco años después el VRAC volverá a pelear por el título copero. El sexto entorchado está a solo 80 minutos para el conjunto quesero que tuvo que moldear el triunfo ante Ciencias, anfitrión en La Cartuja, en el gran duelo de semifinales de Copa del Rey entre los dos principales favoritos y los equipos más sólidos, con permiso de Burgos.

Un duelo muy cerrado como se esperaba y con una intensidad desde el primer minuto que se mostraba como la clave del encuentro. El fuerte calor en la capital hispalense también fue un factor diferencial, pero tanto el conjunto local como los vallisoletanos se mostraron sin fisuras defensivas y pelearon cada oval como si fuera el último. Los de Diego Merino tuvieron que ser pacientes para golpear en el momento oportuno.

La paciencia fue clave porque al descanso el electrónico no se movería, pese a las indisciplinas de ambos equipos que jugaron en inferioridad por momentos. Ni el fiable Iñaki Mateu, en dos ocasiones, ni Dyer, conseguirían abrir el marcador. Y eso que hubo momentos de superioridad, primero con la amonestación a KaloKalo Gavidi y luego a Stöhr. 

Tras el intermedio el exquesero Daniel Sthör puso el 5-0 en el electrónico. Fue una acción en inferioridad, tras amonestación a Mauro Perotti, para los pucelanos, que vieron como esa acción marcaría, al menos de momento, el sino del encuentro. Una maul que trabajaba Ciencias y que haría buena aunque sin transformación pese a la buena posición en el golpeo.

LO MEJOR, AL FINAL

Los minutos fueron pasando y se repetirían acciones vistas en la primera mitad, pero las indisciplinas esta vez sí tendrían premio. Greg Dyer sí lograba estrenar el casillero de puntos de los de Merino para el 5-3, antes de que Cormac Fox, revulsivo sevillano, también se mostrase acertado en el golpeo para el 8-3. 

Restaban apenas seis minutos y la fuerza quesera eran sus jugadores de refresco, que fueron decisivos. Ese mayor empuje tendría premio porque  Stringer lanzaba una acción ofensiva, aunque era parado en seco por la defensa local. En una nueva fase Dyer, más listo que nadie, le cedía el oval al medio melé argentino Mauro Perotti que cruzaba la línea de marca, y continuaba hasta lograr el ensayo en el flanco central. Dyer daría desde la transformación la vuelta al marcador con el 8-10 y las prisas de Ciencias y el juego rocoso del VRAC harían el resto. 

El partido estaba abierto y Coque Ortíz cogería el oval para cedérselo al habilidoso Álex Alonso, que hizo la carrera de su vida , para entrar, con rostro victorioso, bajo palos, y certificar con el tiempo reglamentario cumplido el triunfo vallisoletano. Dyer puso la guinda al triunfo de fe y de paciencia de los de Merino que volverán en siete días a Sevilla para tratar de volver a ser hegemónicos en el torneo del K.O.

Diego Merino: «Ha sido durísimo»

El entrenador del VRAC Quesos Entrepinares valoraba sonriente a pie de campo el pase a la final de su equipo, poniendo en valor la importancia de un duelo que era «todo o nada», en el que «los dos equipos han intentado hacer todo lo mejor posible para ellos. Un partido trabado, intenso, tarjetas, golpes de castigo, protestas, el calor también se ha notado». A juicio de Merino el secreto del triunfo estuvo en «meter tanta gente de refresco en los últimos 20 minutos que ha hecho que tuviéramos más claras las ideas, la concentración, hemos cometido menos errores y nos hemos llevado el partido, remontándolo en un campo complicado. Ha sido durísimo, contento de estar en la final y volver el próximo fin de semana». Allí esperará Recoletas Burgos que derrotó con contundencia en San Amaro a la Santboiana por 46-28 en un partido que dominaron de principio a fin, con holgadas ventajasdesde los primeros minutos, y también al intermedio (24-11). Queseros y burgaleses ya se midieron hace dos semanas en PepeRojo con triunfo visitante por 29-31, con remontada final incluida.