FÚTBOL / REAL VALLADOLID
Aparece el mejor Monchu en el Real Valladolid
«Cuando tengo un objetivo que cumplir me hago más grande», reconoce el mediocentro, mejor blanquivioleta ante la Real Sociedad
Pacheta finalizó el entrenamiento de ayer con un ejercicio en campo de 20x15 metros en el que se enfrentaban un portero y un jugador de campo por equipo. Luego entraba un segundo jugador y después un tercero, para retirarse paulatinamente por orden de entrada y acabar de nuevo uno contra uno.
Dos jugadores sobresalieron en este ejercicio. Masip demostró que sus problemas gástricos están superados con actuaciones superlativas en el uno contra uno, del que es especialista. El otro fue Monchu. Marcó casi todo lo que tiró con su típico disparo seco y duro, como un directo de Tyson.
Sí, Monchu está en plena forma. Fue el mejor ante la Real Sociedad y vive su etapa más brillante desde que llegó a Pucela la pasada temporada, como él mismo admite. «Hicimos un gran partido. El equipo estuvo muy bien y yo también me encontré muy bien en el campo. Si tuviese que elegir mi mejor partido, sería éste».
Su novedosa ubicación ante los donostiarras, en el eje el mediocentro, le gusta tanto como cuando se escora hacia los pasillos interiores. «Cuando llegué al Real Valladolid dije que estoy acostumbrado desde pequeño a jugar de pivote o de volante. Me siento muy cómodo en las dos posiciones».
El palmesano estuvo flanqueado en el mediocampo por dos jugadores como Óscar Plano e Iván Sánchez, que son eminentemente ofensivos aunque también defiendan. No le asustó el reto ante un rival que acumulaba ocho victorias consecutivas. «Cuando tengo un objetivo que cumplir me hago más grande. Iván y Óscar hicieron un trabajo espectacular, tanto ofensivo como defensivo. Me sentí muy cómodo con ellos».
Monchu casi marca en una suerte que se le da bien: el gol olímpico (córner directo a la red). «Desde que puse el balón en el córner vi que no había nadie en el primer palo y busqué el disparo directo. Por mala suerte no entró». Remiro despejó y el cuero cayó a los pies de Feddal, que falló a puerta vacía. «Le comenté después algo de broma», confiesa su compañero.
El mallorquín reconoce que no luce tanto como debería su disparo de lejos, letal en bastantes ocasiones. «Ahora me encuentro con mucha confianza. El míster y todo el equipo me dice que tengo un buen disparo, y que cuando esté en el borde del área, tire sin problema»
Monchu vio cómo se le anulaba un gol de centro-chut por falta previa pero firmó la jugada del partido a mandar un pase de 50 metros para que Sergio León marcase el único tanto del choque. «Sabíamos que la Real Sociedad presiona muy arriba. Sergio es un jugador muy potente en carrera y salió la jugada perfecta».
Pacheta utiliza muchos jugadores pero a la vez está caro entrar en el once inicial, por el creciente nivel del equipo. «Se ve en los entrenamientos, todos trabajamos muy bien. Pero la temporada es larga y necesitamos la mejor versión de cada jugador. Esa competencia nos hará mejores a todos».
El blanquivioleta se siente a gusto con el 5-3-2. «Tenemos que pulir detalles, como con el 4-3-3, pero tenemos que seguir así. Me siento muy cómodo porque en el centro seguimos tres».
El pleno de seis puntos en los dos últimos partidos no se debe para el mediocentro a un cambio radical del equipo ante esta mutación táctica, sino a la persistencia en una idea. «Llevamos varios partidos jugando muy bien pero los resultados no eran positivos. Ahora tenemos los frutos. Necesitábamos esos puntos».
Restan tres partidos antes del parón liguero a causa del Mundial pero el balear no quiere fijarse una meta de puntos en ellos, sino que focaliza su pensamiento en el próximo rival. «Osasuna lleva años con el mismo entrenador y es un equipo muy trabajado y duro en su casa. Solo pensamos en el domingo, en sacar algo positivo, y en ir partido a partido».