LA ESPUELA
Quique Matilla: «Viajo tanto que si tuviera que estar empadronado sería en un tren»
Vallisoletano, de la generación de cómicos de JJ Vaquero, Clavero, Nacho García y Fran El Chavo, el año que viene cumplirá 20 años ‘haciendo el humor’. Aunque iba para maestro, pronto la fina ironía y la alegría se cruzaron en su vida. Padre de tres hijos, asegura que gracias a ellos no tiene insomnio «acabo muerto». Reside en Asturias, aunque su situación profesional le hace ir todas las semanas a Valladolid y recorrerse media España en tren y en coche.
Pregunta. He hecho bien mi trabajo, me he documentado para la entrevista y me encuentro que ha trabajado con el polémico productor José Luis Moreno. ¿Algo que declarar?
R.- (Risas). ¡Hostias sí! Y tengo que decir lo mismo que el resto de las personas.
P.- ¿Que le debe dinero?
R.- Pues que muy majo, todo te lo pone muy bien, pero…la transferencia nunca llegó. Y hace de esto 8 o 9 años. Si le viene bien para la fianza, me alegro. Los que me dan pena son los muñecos. (Risas).
P.- Leo su agenda y veo que ha dejado las actuaciones en los bares por los pueblos.
R.- La verdad es que el verano se presenta muy bien. Al aire libre el humor es menos peligroso. Tengo mucho trabajo en pueblos de Castilla y León y parte de España. Nuestras familias están tan felices de que dejemos los bares nocturnos y lo hagamos al aire libre.
P.- ¿La gente tendrá ganas de reírse con o sin mascarilla?
R.- Pues fíjate que no creo que sea mejor cómico, pero sí veo que la gente se ríe más. Quiere divertirse y pasarlo bien.
También soy víctima de José Luis Moreno, trabajé con él pero nunca me llegó la transferencia. Supongo que la copiaría mal
P.- ¿Y ahora de dónde sale el humor?
R.- Siempre pensé que no iba a hacer humor con lo vivido en la pandemia, pero es que lo hemos vivido todos y hay mucho que contar. Todo el mundo ha pasado el teletrabajo, los vecinos-policías, el confinamiento con tres hijos, como es mi caso, la verdad es que hay muchos filones.
P.- Y con todo esto que ha pasado, no se ha arrepentido de no ejercer como maestro.
R.- Han sido meses muy complicados. Y eso que nosotros lo hacemos en locales de otros, pero fíjate la gente que ha tenido que lidiar con local, trabajadores…No me he arrepentido. Sigo teniendo mi carrera de Educación y Trabajo Social, no lo he pensado, pero si lo dejó será porque la comedia quiere que lo deje.
P.- El año que viene cumple 20 años haciendo el humor. ¿Cansado?
R.- Lo hablaba con un compañero. 20 años el año que viene y te dicen que hay que reinventarse, que es el eufemismo de sobrevivir. Todo lo que habías picado no vale para nada y hay que empezar de nuevo.
P-. Al menos ya tiene 20 años cotizados.
R.- Y alguno más, que trabajé de maestro. (Risas)
P.- ¿Y el humor volverá a ser como antes?
R.- El humor no cambia, pero ha cambiado lo que es hablar de temas complejos. Cada vez es más complicado. En este caso, el confinamiento nos ha venido muy mal.
«Mandaría a ‘el sotano’ a los negacionistas, hay que ser muy cabezota»
P.- ¡Qué tiempos aquellos en los que hablaba de todo en sus monólogos, ¿los recuerda?
R.- Sí, pero es que no tenemos claro que lo importante en el humor es el contexto. No es lo mismo ver un espectáculo en un teatro y que luego te lo cuenten o manden un vídeo fuera de contexto. Yo siempre pregunto qué pasaría si me dejas tu móvil y leemos tus mensajes en tus últimos cinco grupos de WhatsApp.
P.- ¿Qué beneficios tiene ser familia numerosa?
R.- A nivel económico muy pocos, no compensa. Yo vivo en Asturias y todas las semanas viajo en trenes y nos hacen un 20% de descuento. Cada cinco viajes miro a la más pequeña y la digo «a éste invitas tú».
P-. Sus amigos y compañeros de HPO presumen de Las Delicias, La Rondilla o Geria. ¿Usted?
R-. Estoy muy apátrida. Lo comentaba el otro día, cuando cuento chistes de Valladolid me siento un guiri. Viajo tanto por trabajo que me siento de todos los sitios. Soy un vallisoletano, que vive en Asturias y que trabaja por toda España. Si tuviera que estar empadronado sería en el tren.
P.- ¿A quién mandaría unos cuantos días al sótano a reflexionar?
R.- ¡Buf!, se iba a quedar pequeño. Mandaba a los negacionistas, es increíble que a estas alturas de la película todavía haya gente que lo niegue. Hay que ser muy cabezón para pensar que está inventado, algunos tienen muchas ganas de vivir en ‘El Show de Truman’. Les metía a todos en el sótano para que se negaran entre ellos.
P-. ¿De todo esto hemos salido con mejor sentido del humor?
R.- Con más ganas de reírse, pero algún porcentaje de gente tiene ganas de estar con la libreta para apuntar todo lo que haces mal. O sacar la brocha para ver de qué color eres.
P.- ¿Qué se sabe del Humor de Protección Oficia? ¿Alguna exclusiva?
R.- Pues algo estamos maquinando. Se llamará Lo de Ferias.
P.- ¿A Quique Matilla quién la hace reír?
R.- Mucha gente. Lo último por ejemplo un post de los Superpoderosos. Me gusta mucho Javier Cansado.
P.- ‘Si no lo digo reviento’…¿cuál?
R.- Tengo ganas de que regrese el fútbol. Soy muy aficionado al Pucela, y tengo ganas porque los programas de fútbol de la radio me amenizan mucho los viajes en tren y en coche.
P-. La más complicada, ¿un cachopo o un cuarto de lechazo?
R.- Pues tiro para la tierra adoptiva. Lo argumento. Me pasa como con el pescado. Me da pereza lo de quitar espinas, y con el lechazo me pasa lo mismo. El cachopo es comida ciega, cuchillo, tenedor y para adelante.
P.- No le preguntaré por el talento y el humor femenino que no quiero polémicas. A no ser que tenga algo que decir…
R.- Sin problemas, Pues claro que hay mucho talento femenino. No he distinguido nunca entre cómico y cómica, y he estado con muchas compañeras que les va perfecto, y con algunas que no han valido para esto, al igual que con mis compañeros. Ellas tienen más complicaciones a la hora de hacer reír con el público, pero el talento no hay que dudarlo.
P.- ¿El futuro qué?
R.- Pues como todos. Te puedo hablar del futuro de esta semana, de la que viene ni idea.