EL EUROPEO DE BALONMANO
España sufre pero pone pie y medio en semifinales
El equipo de Jordi Ribera se impone a Austria por 30-26 y se mantiene invicto en la fase decisiva del torneo
El ambiente era el de las grandes ocasiones. No entraba un alfiler en el Wiener Stadthalle. Austria estaba dispuesta a convertir el encuentro en todo un via crucis para los Hispanos. De entrada, lo consiguió. El alto ritmo y juego barullero que propuso Ales Pajovic descentró a los españoles. Pero no fue suficiente. Porque los de Ribera se acabaron encontrando y ya tienen pie y medio en las semifinales del Europeo (30-26).
El encuentro empezó en las pizarras. Jordi Ribera, recordando la derrota austríaca ante Croacia, quiso hacer mella en la debilidad del conjunto centroeuropeo. Apostó por una defensa adelantada pero se encontró con que el muro lo presentaban los de Pajovic. Austria basó su juego en la contundencia defensiva y las rápidas transiciones.
Todo lo contrario que España, que tardó en encontrarse. Las brechas en el marcador duraban un suspiro. Lo mismo que Bozovic tardaba en anotar. Porque los de atrás no iban a la ayuda pensando que el avanzado debía ocuparse de él y pese a lanzar desde la zona de su lateral contrario, el gigante austriaco solo tenia ojos para el gol. Su brazo resultaba determinante. Tanto como las paradas de Rodrigo, que mantuvo a los suyos agarrados al encuentro.
Muchas imprecisiones
Porque el juego de los anfitriones seguía descentrando a España, más pendiente del frenesí que de desarrollar su talante. Llegaron las imprecisiones. Y tras la roja a Herburger, el encuentro entró en una confrontación que solo beneficiaba a los austriacos. Y a Maqueda. En situaciones de descontrol no hay nadie como él. El jugador toledano tiró del carro como lo hizo Aleix Gómez, vital en recuperar un balón con la portería vacía y propiciar la velocidad desde las esquinas.
En ese instante España encontró en Figueras lo que no había encontrado en Aguinagalde y se fue con un tanto de ventaja a los vestuarios. El resultado era lo mejor. Por eso, tocaba empezar de nuevo. Esta vez, Ribera decidió bajar al 6:0 y siguió apostando por el carácter de Maqueda. Dio con la tecla. Los Hispanos calmaron el juego, empezaron a defender con mayor contundencia y descentraron a Austria. La circulación en ataque y la efectividad de la segunda línea hicieron el resto. Porque incluso con dos menos, España supo marcar. Y aunque no fue el triunfo más lucido, los Hispanos dan un paso de gigante hacia las semifinales.
España: Pérez de Vargas, Rodrigo Corrales, Maqueda (6), Entrerríos (4), Fernández (3), A. Dujshebaev(2), D. Dujshebaev, Sarmiento (2), Aguinagalde, Solé (1), Figueras (4), Cañellas (1), Morros, Gómez (3), Ariño (4), Guardiola
Austria: Bauer, Eichberger, Bozovic (5), Weber (3), Wöss (1), Posch (2), Frimmel (4), Dicker (2), Herburger, Zeiner (2), Zivkovic, Bilyk (3), Wagner (2), Jochmann (1), Hutecek (1), Santos