Contra la escuela vallisoletana
El Recoletas BM Atlético de Pisonero deberá sortear los obstáculos que supone medirse al BMLogroño dirigido por los exBMValladolid Miguel Velasco y Rubén Garabaya
Miguel Ángel Velasco felicita a un jugador ante la atenta mirada desde el banquillo de Garabaya.-CIUDAD DE LOGROÑO
La llamada ‘escuela vallisoletana’ que tanto lustre ha dado al balonmano de Valladolid desde hace más de dos décadas, vuelve a interponerse en el camino del Recoletas Atlético Valladolid. Mañana sábado en territorio riojano, pasado y presente se verán las caras con la ‘escuela vallisoletana’ y las enseñanzas del mago Pastor como protagonistas. El Recoletas Atlético Valladolid se verá las caras con el renovado BM Logroño de los ex BM Valladolid Miguel Velasco y Rubén Garabaya. Un rival complicado, tercero en la tabla y con la privilegiada condición de invicto (solo la tiene el Barça) aunque con cuatro partidos empatados.
El adiós de otro ilustre vallisoletano, ‘Jota’ González, al todopoderoso PSG como ayudante de Raúl González, ha abierto las puertas al que fuera entrenador ayudante la pasada temporada. Un Miguel Velasco que no solo recibe parabienes de los que han sido sus únicos maestros (Pastor, Raúl y por supuesto ‘Jota’) como un entrenador que lo tiene todo para triunfar y llegar a lo más alto, sino que no reniega de sus orígenes. «Mi etapa en Valladolid, por supuesto, es inolvidable porque me aportó mucho. Fui allí con 15 años y estuve 9 años. Allí aprendí el balonmano que intento inculcar porque tuve de entrenadores a ‘Jota’, Raúl y Pastor. Luego me fui a Logroño con ‘Jota’ como jugador suyo y después como ayudante de entrenador. Es un estilo reconocible y una suerte o desgracia de haber sido central como Raúl o Chema, de los que aprendí mucho», indica orgulloso.
Miguel Velasco, en su primera campaña como primer entrenador, tiene a otro ‘ex’ ilustre del BMValladolid, como es el recién retirado Rubén Garabaya, como entrenador ayudante. «Aunque he coincidido con él jugando lo principal es que nos llevamos muy bien y coincidimos en la misma manera de ver el balonmano, la que hemos mamado en estos años».
Para el técnico del BMLogroño el partido de mañana lo califica como de «muy complicado» pese a que su equipo sigue sin perder ningún partido esta temporada y se mantiene en la parte alta (es tercero con 10 puntos, tres más que el Recoletas, y con un punto menos que el segundo clasificado, Ademar de León, aunque también con un partido menos). «El hecho de que sigamos invictos no indica que el partido ante Valladolid sea fácil, todo lo contrario. Es un equipo que ha podido mantener el bloque, que juega de memoria con un gran juego combinativo, con dos grandes centrales, un gran pivote y una portería que está aguantando. Es la columna vertebral que todo entrenador quiere mantener sólida. Nos hemos enfrentado en dos amistosos esta campaña y en los dos, aunque los ganamos, sufrimos».
El que fuera central del desaparecido BMValladolid, ahora como primer entrenador, reconoce que las exigencias del guión obligan a su club a apostar por os jóvenes como lo hiciera antaño «su» BM Valladolid. «Es el estilo de hace años del BMValladolid, de apostar por proyección y futuro. Hemos bajado presupuesto y es el único camino que hay para seguir adelante».