La confianza ciega en el ‘séptimo’

Está claro que Carlos Suárez mantiene una confianza ciega en Braulio. Ni en los peores momentos se ha dudado de su continuidad. De ahí que si el gallego finaliza su nuevo contrato, hasta el 30 de junio de 2019, será el director deportivo que más tiempo ha estado al lado del presidente.

Vázquez fue el séptimo DT en llegar pero es el que más raíces ha echado. Cuando Suárez llegó a la presidencia en 2000 ocupaba el puesto Santiago Llorente, que se mantuvo cinco años más. En su currículum aparecen dos permanencias en Primera y un descenso a Segunda. Con su marcha, el presidente quiso dar una giro a la situación y confiar en una persona que no había sido futbolista, Víctor Orta con el que no se logró ascender y duró solo un año.

Más tarde se volvió al perfil de exjugador. Así se dio la oportunidad a un hombre de la casa como José Luis Pérez Caminero (2006-2008) con el que se obtuvo el esperado ascenso y asentarse en la elite. Al hoy director técnico del Atlético de Madrid le siguió Roberto Olabe (2008-2010), con el que se volvió a descender después de cambiar todo el organigrama y la forma de trabajar en el club.

Tras este fracaso se volvió a contar con exjugadores de la casa que conocieran lo que se cocinaba en los fogones blanquivioletas. García Calvo (2010-11) y Alberto Marcos (2011-2014), que fue quien dio paso a la llegada en junio de Braulio, aunque estuvo trabajando desde comienzos del mes de enero.