Diario de Valladolid

club baloncesto valladolid

Un equipo de otra pasta

Con el recuerdo presente de Lalo García y ajeno a los problemas extradeportivos un MyWiGo ‘in crescendo’ suma un nuevo triunfo ante Melilla que le catapulta al cuarto puesto

Micky Stobart lucha por un rebote junto a los melillenses Wright y Gatell-Miguel Ángel Santos

Micky Stobart lucha por un rebote junto a los melillenses Wright y Gatell-Miguel Ángel Santos

Publicado por
Guillermo Velasco
Valladolid

Creado:

Actualizado:

Nada parece interponerse en el camino de un MyWiGo Valladolid, sin lugar a dudas, un equipo hecho de otra pasta. Un equipo en el mas sentido literal de la palabra que es capaz de sobreponerse como pocos, como nadie, a los problemas extradeportivos que envuelven al club. Problemas ya sea de índole económico (van camino del quinto mes sin cobrar sus emolumentos) o ya sea de índole emocional (con la desaparición de Lalo García, que el viernes en su 44 cumpleaños acumulaba 16 días sin saberse nada de él). Pero el grupo de Porfi Fisac, hambriento de gloria y de reconocimiento por parte de un presidente que sigue haciendo oídos sordos a la cruda realidad que vive el club en el día a día, fue capaz de sobreponerse a un flojo comienzo en el que confundió la velocidad con las prisas. El Melilla, bien armado desde el juego perimetral supo aprovecharse inicialmente de los experimentos de Fisac dando minutos al joven Manchón en detrimento de Uriz y su recién llegado recambio, Óscar Alvarado. Pero lo mejor del MyWiGo en ese desacertado tramo inicial fue que sin jugar absolutamente a nada fue capaz de terminar el primer cuarto ‘vivo’ (11-15).

La entrada de Rakocevic en cancha iba a dar otro aire totalmente distinto al MyWiGo Valladolid. Al menos de cara al aro. El jugador balcánico se convirtió en mortífero francotirador desde más allá de la línea de 6,75 metros que ejerció de aguijón letal para un Melilla que poco a poco, minuto a minuto, fue desinflándose. Así, tras llegar al descanso con las espadas en todo lo alto (33-32) el conjunto morado pareciendo invocar a la brigada de la carga ligera apretando la primera línea de pase y conectando su hasta entonces desactivado contraataque, noqueó al Melilla. La salida en tromba tras el descanso, con un parcial significativo de 11-3 en apenas dos minutos, abrió una brecha irreparable para un rival en el que solo Devin Wright era capaz de plantar cara.

Las diferencias fueron en aumento hasta una máxima que alcanzó los 18 puntos 64-46 con Pino y Rakocevic de maestros de ceremonia. Con el partido decidido el MyWiGo permitió el despertar de Melilla que lograba maquillar la derrota hasta el definitivo 72-63.

tracking