Fernando Palacios toma el Museo de Palencia con ‘Custodiar la naturaleza’
El artista vallisoletano despliega en la Casa del Cordón su poética abstracción con medio centenar de pinturas y esculturas
Una imagen de 'Custodiar la naturaleza'
«Cuando contemplo estas obras me doy cuenta de que son fruto de una mirada que va adquiriendo sentido. Este es un proyecto intemporal. Es como si fuera un jardín extraño, muy personal, que todavía no ha sido concluido», reflexiona en declaraciones a este diario el artista Fernando Palacios (Valladolid, 1976) ante el medio centenar de obras que exhibe en el Museo de Palencia, donde protagoniza la muestra individual Custodiar la naturaleza.
Una propuesta que discurre en paralelo a la senda que marcó en series mostradas en Madrid, en la Galería Alberto Cornejo, o Gijón, en la Galería Bea Villamarín.
Una exposición en la que el artista reúne trabajos de series pasadas con obras realizadas en tiempos más recientes, en las que, por ejemplo, recupera los tonos negros del informalismo más puro, o se entrega a una forma de ejecución más vinculada al action painting.
Una obra de la exposición.
Una abstracción muy personal que, cargada de materia, busca conectar con lo esencial del ser humano, con sus raíces, con sus vínculos con la tierra –siempre origen, punto de partida en la pintura de Palacios–; con un entorno que es agua y campos de trigales, que es bosque y mar de nubes, que es espeso y etéreo, que es luz y oscuridad. «La clave de esta propuesta está en ese mensaje de ‘Custodiar la naturaleza’», apunta el responsable de series como Espacios líquidos, Glaciem maris o Incógnita natura.
Y como vigilantes, como custodios de esos paisajes poéticos, Palacios posa las primitivas esculturas de esos pájaros extraños que él ha ido trabajando a lo largo de la última década, mitad ave mitad raíz. «He querido buscar un contraste entre su cuerpo, su materia, con esas texturas y ese carácter primigenio, y su dimensión espiritual», explica el artista afincado en Palencia, cuyo estudio se ubica a medio camino entre el citado museo, en la Casa del Cordón, y la seo. «Cada vez que salgo al atardecer, veo las cigüeñas fundiéndose con la arquitectura de la catedral. Vigilando. Custodiando las piedras», añade para remarcar el carácter simbólico de la imagen.
Fernando Palacios durante la inauguración.
‘Reclinado en el altar de la naturaleza / dos aves extrañas custodian el árbol al que rezo. / Cruz, candelabro o rama dorada / ya son lo mismo en la niebla en la que habito’, proclama en verso el artista. Unos versos que forman parte del poema Invocación y que resuenan en el Museo de Palencia en la voz del maestro de doblaje Félix Alcolea. «Es una especie de oración íntima, de reflexión muy personal que de alguna manera argumenta esta exposición», concluye.
Custodiar la naturaleza permanecerá en el Museo de Palencia hasta el 1 de diciembre.