María Goiricelaya: «Nevenka fue muy valiente al luchar en soledad contra el poder»

«Ella lo repitió en muchas ocasiones:  se sentía como un pez de colores que había caído en una pecera llena de peces negros», recuerda la directora, dramaturga y actriz vasca María Goiricelaya . Ella, quizá lo recuerden, era una veinteañera Nevenka Fernández , concejala de Hacienda del Ayuntamiento de Ponferrada, que en 2001 se atrevió a denunciar por acoso sexual al regidor de la localidad, el popular Ismael Álvarez , que acabó siendo condenado. Ella tuvo que dejar el país. El próximo sábado, 18 de noviembre, la veterana compañía granadina Histrión Teatro levantará en el LAVA una metafórica pecera para recrear la historia de quien, con el transcurrir de los años, es considerada como una pionera del #MeToo en España, para evocar el entorno constreñido y asfixiante con el que tuvo que lidiar.

«La idea la manejaban Nines Carrascal y Gema Matarranz (responsables de Histrión Teatro) desde hacía tiempo. Se pusieron en contacto conmigo para hablar de proyectos y me dijeron que tenían la historia de Nevenka en la cabeza. Yo no tenía el caso tan presente y me puse al día: era una historia que había que contar, sin duda», evoca en declaraciones a este diario Goiricelaya, que además de firmar el texto dirige a Matarranz –en el papel de Nevenka–, Ales Furundarena y Marta Megías .

Goiricelaya, que el pasado mes de marzo se hacía con un Premio Max por adaptar Yerma para la Sala BBK, era «una adolescente» cuando el Caso Nevenka saltó a los medios. «Tenía un recuerdo vago. Quiero pensar que ahora ese caso sería imposible; y digo quiero pensar, porque Nevenkas siguen existiendo en todo el mundo. El suyo es un nombre que ha trascendido a la persona, es el reflejo de todas las mujeres que están silenciadas soportando ese tipo de abusos . Pienso que con la conciencia y la sensibilidad que tenemos ahora eso ahora sería impensable. Por eso ella me parece tan valiente: se vio abocada a luchar en soledad contra un entorno con mucho poder», reivindica la dramaturga.

En Nevenka resuenan, una vez más, las voces que se escucharon en el pasado: desde la de la joven que renuncia al cargo y denuncia su caso a la del fiscal José Luis García Ancos , apartado del caso por su machista proceder. «He intentado rescatar  lo que me parecía esencial de ese caso, para dar un reflejo de lo que sucedió. Al mismo tiempo, me he permitido la licencia de ficcionar momentos que seguramente tuvieron lugar y de los que no fuimos testigos. La información que generó el caso fue muy extensa y desde un punto de vista informativo fue un caso muy cubierto, pero hay una parte humana que nos perdemos. Me interesaba abordar cómo comenzó aquella relación, qué le pasó con su pareja y con su familia... Si no ahondamos en lo humano todo aquello que fue tinta sobre papel podía quedar en un lugar muy frío, poco sensible y poco real », reflexiona la autora de la dramaturgia.

Histrión Teatro estrenó Nevenka el pasado mes de marzo, en el Teatro Alhambra de Granada, sólo unos días antes de presentarse en el Bergidum de Ponferrada, donde, como recuerda Goiricelaya, la compañía vivió uno de los momentos más emotivos de toda la gira, con el público aplaudiendo al final de la función y coreando el ‘Yo sí te creo’.

La compañía, dicho sea de paso, optó por «respetar» el ‘retiro’ de la berciana. «Sufrió mucho. Creo que sigue la estela de su legado, pero lo hace desde la observación, la calma, la distancia, protegiéndose. No hemos querido ser  invasivas. Además, al tomar parte del testimonio de los medios que se nutrían de su palabra, y combinarlo con la ficción, lográbamos un buen equilibrio a la hora de contar su historia». concluye la dramaturga.