Aparecen por primera vez restos de la muralla celtibérica, la más antigua hallada en la ciudad

Las obras ejecutadas recientemente en el tramo en la zona norte entre la Puerta de Santiago y los jardines del Alcázar han sacado a la luz por primera vez restos de la muralla celtibérica de la capital segoviana, la más antigua de la ciudad que podría datar del siglo II antes de Cristo.

Un hallazgo que fue calificado por el arqueólogo territorial, Luciano Municio, como “uno de los más importantes para la arqueología de Segovia que se ha producido en los últimos años”, ya que este descubrimiento permite contar con una secuencia estratigráfica que va desde la segunda Edad de Hierro a la edad moderna y contemporánea que hasta ahora no se había podido documentar en la ciudad.

En las actuaciones realizadas en unos tres metros de espesor de estratos acumulados a lo largo de más de dos mil años también han aparecido restos de una cimentación de una construcción romana altoimperial y materiales de cronología visigoda, “lo que viene a confirmar que Segovia va a estar ocupada durante los siglos V, VI y VII después de Cristo, que era una de las incógnitas que también ha quedado resuelta”, explicó Clara Martín, la arqueóloga encargada de esta excavación.

Los dos expertos, acompañados por la concejala de Patrimonio Histórico y Turismo, Claudia de Santos, y la jefa del Servicio de Cultura de la Delegación Territorial de la Junta, Ruth Llorente, visitaron hoy este espacio ubicado en el camino extramuros que existía antiguamente y que subía desde la iglesia de Santiago hasta la antigua catedral de Santa María por el conocido postigo del Alcázar, desaparecido actualmente.

Durante la visita, Municio detalló que hasta ahora no se habían encontrado restos de la muralla celtibérica por varias razones, entre ellas que era la primera vez que se excava en este tramo y que “el casco antiguo de Segovia es una zona muy complicada para la excavación por sus propias características”. “Ahora tenemos por fin estos restos de lo que consideramos la muralla más antigua de Segovia por el momento en una zona que se puede convertir en un sitio magnífico para la interpretación de las fortificaciones de la ciudad”, destacó el arqueólogo territorial, que incidió en que se va a continuar con las labores de investigación gracias a la financiación de la Junta de Castilla y León, “porque hasta ahora se ha hecho una valorización previa”.

Por su parte, Clara Martín concretó que esta actuación, que se engloba dentro del Plan de Recuperación de la Muralla que lleva a cabo el Ayuntamiento de Segovia y que ha supuesto la inversión de unos 15.000 euros, se inició como “un mero seguimiento arqueológico” que, dada la entidad de los restos que se fueron documentando, se convirtió en “una excavación en área abierta”.

“En todo este espacio hemos vaciado niveles de más de cinco metros de altura, retirando toda la estratigráfica que había sobre los restos que ahora son visibles. Además, se ha realizado una investigación de gabinete con todos los materiales que se han recuperado, lo cual nos ha demostrado que tenemos una secuencia que nos va a abarcar desde los siglos II antes de Cristo, hasta los siglos XVI y XVII y época contemporánea”, añadió Martín.

A los hallazgos de los restos arqueológicos vinculados a la muralla celtibérica se suman los materiales encontrados de cronología visigoda y medieval, donde fundamentalmente se ha recuperado la fosa de cimentación, ya estudiada en otras zonas de la ciudad. Entre las anécdotas de estos trabajos, Martín comentó la aparición de un enterramiento de una mujer en la zona excavada, “aislado y de época medieval, que no se sabe porque estaba en este tramo fuera de un recinto de culto y no asociado a ningún tipo de enterramiento”.

La labor de investigación de estos hallazgos continuará a partir de mañana, como confirmó Ruth Llorente, con una partida económica de 10.000 euros que se centrará en su lectura estratigráfica, “todo ello necesario para poder avanzar en un proyecto y convertir esto en un recorrido visitable y didáctico”. Martín concretó que precisamente “la siguiente fase de estudio va a ser la confirmación de los niveles celtibéricos asociados a este recinto defensivo”.

Nuevo paso a los pies de la muralla

Las obras realizadas también han permitido recuperar la senda que unía la Puerta de Santiago con el parque del Alcázar, un paso que aparece en el grabado de Wyungaerde de 1562 y es mencionada por historiadores como Diego de Colmenares y que facilitaba la subida a los vecinos del barrio de la Puente Castellana. Claudia de Santos anunció que, a través de una subvención de 60.000 euros concedida por el Ministerio de Cultura, se van a llevar a cabo obras de consolidación en esta zona para que la roca que cierra el paso actualmente desaparezca y “se pueda recuperar el uso de ese antiguo paso que unía la iglesia de Santiago con la antigua catedral de Santa María”.

“Habría dos fases, la primera es la consolidación de la piedra que ahora está cerrando el paso y que tiene relación con el hundimiento de la cueva de la Zorra”, dijo la concejala, que agregó que la segunda parte, con el camino abierto, “enlazaría con las escaleras actuales de la cueva” hasta que se pueda recuperar la traza original de la muralla que ha aparecido debajo de esta zona.

La primera fase se iniciará en breve, una vez licitada la intervención, y con un periodo de ejecución de 2 ó 3 meses. La segunda tendrá que esperar, como recalcó De Santos, a que el Ayuntamiento consiga los fondos necesarios de otras instituciones como la Junta o el Ministerio.

Cantera de época romana

Además de la senda, durante las actuaciones también se ha localizado una zona de cantera con un sistema de talla “muy peculiar” y que conservan las huellas de extracción de sillares, como destacó Luciano Municio, que aseguró que únicamente había documentado algo similar, por el sistema de extracción de bloques, en una cantera romana de caliza localizada en Tarragona.

“Probablemente esta cantera desconocida hasta ahora tenga bastante que ver con las construcción romana en Segovia y, sobre todo, en esta zona, como el edificio de detrás con sillares de caliza, y que puede ser uno de los recursos didácticos estupendos del paseo”, señaló.

El Ayuntamiento de Segovia ha invertido, en los últimos ocho años, más de 2.800.000 euros en la restauración de la muralla uno de los monumentos más importantes de la ciudad, cuya construcción se remonta al siglo XI, declarado Monumento Histórico Artístico en 1941, recuperando cerca de 1.200 metros de fortificación de los tres kilómetros de perímetro total.