Los salarios pierden 419 euros de poder de compra en los últimos dos años

La recuperación económica no llega a los bolsillos de los asalariados de Castilla y León. Y no solo porque el crecimiento de los ingresos sea excesivamente moderado, sino también porque la inflación absorbe parte del poder de compra de los salarios. La remuneración media en Castilla y León es de 1.482 euros mensuales, lo que supone un aumento del 1,1% en el último año. «Sin embargo, la capacidad de compra del salario ha perdido un 2,3% en los últimos ocho trimestres», lo que equivale a que un asalariado de la Comunidad autónoma «disponga de 419 euros menos año» que en 2016.

Así lo asegura el informe de Adecco sobre Oportunidades y Satisfacción en el Empleo, que sitúa a Castilla y León en el medio de la tabla de las autonomías. La firma de trabajo temporal utiliza los datos de la Encuesta de Población Activa del INE del segundo trimestre para hacer estos cálculos. Excluye del salario las pagas extras y las horas extraordinarias y lo hace antes de computar retenciones y deducciones. No tiene en cuenta, pues, la Encuesta de Coste Laboral que eleva estos datos al incluir todos los ingresos brutos.

De acuerdo con Adecco, el salario nominal del segundo trimestre de 2018 en Castilla y León es el mayor desde marzo de 2013 y ha supuesto un incremento de 17 euros mensuales. Al igual que la Encuesta de Coste Laboral, el informe de Adecco constata la existencia de una importante brecha salarial entre las comunidades autónomas. Los asalariados de la Comunidad cobran 164 euros mensuales menos que la media, lo que implica un 11,1% por debajo. Sin embargo, los ingresos brutos mensuales medios son un 31% inferiores a los de Madrid, al cobrar 463 euros al mes.

En el lado opuesto, los asalariados extremeños son los que tienen las menores remuneraciones del país con mucha diferencia. Cobran 149 euros menos que los castellanos y leoneses, un 11,2%.

La brecha entre las dos regiones con salarios mayores y menores es de 612 euros. Los extremeños cobran un 46% menos que los madrileños.

Esa doble velocidad se pone de manifiesto también en la pérdida del poder de compra. Sólo Asturias y Navarra han ganado poder adquisitivo en los dos últimos años; sobre todo la primera que aumenta en 199 euros anuales. Sin embargo, la pérdida de capacidad de compra es notablemente diferente entre el resto. Las dos comunidades líderes en salarios, Madrid y País Vasco, recortan más su poder de compra, junto con Murcia, La Rioja, Andalucía, Aragón y Castilla-La Mancha.

La pérdida de poder adquisitivo de Castilla y León se ha intensificado en el último año. En el segundo trimestre de 2017 era de un 0,7% y ahora se amplía al 2,3% sobre 2016.

Está por ver si la brecha salarial se reduce o se amplía tras el acuerdo firmado el pasado 31 de julio entre los sindicatos CCOO y UGT y la patronal Cecale, donde las tres organizaciones cifran en un 3,2% la pérdida de capacidad de compra de los salarios reales en 2017 y la variación salarial en un 1,7%. El pacto recomienda en los próximos años una subida salarial adicional, no vinculante para ninguno, que equipare los salarios de la Comunidad con los del conjunto del país.

De acuerdo con Adecco, el mayor aumento del IPC, cuyo indicador adelantado refleja en agosto un repunte del 2,2% interanual, está quebrantando el poder de compra de por sí inferior en los asalariados de Castilla y León y de las regiones cuyos salarios no superan este porcentaje.

Los tres primeros años de la recuperación económica -2014, 2015 y 2016- el índice de precios al consumo (IPC) registró caídas. Es a partir del año pasado cuando iniciaron un camino moderadamente ascendente, momento en el que «el grueso de las comunidades autónomas ve cómo la capacidad adquisitiva de su salario medio se erosiona».

De hecho, el salario medio de España ganaba un 1,4% de su poder adquisitivo en junio de 2016 y en la actualidad pierde un 2,3%, lo mismo que en Castilla y León. En valor absoluto, esta pérdida de poder de compra equivale a que el asalariado medio tiene, al cabo de un año, 419 euros menos en su bolsillo de los que tenía hace dos años.

En los dos últimos años se han acumulado diferencias en la variación del poder de compra del salario medio de las distintas comunidades autónomas de hasta 1.042 euros. Esa brecha se constata entre Asturias, que gana 199 euros de poder de compra, y Murcia que pierde 843. En este periodo, «la capacidad de compra del salario medio de Castilla y León ha ganado 50 euros anuales en comparación con la media nacional, pero ha perdido 339 euros al año en relación con Galicia». Sin embargo, sobre Cataluña ha perdido 19 euros al año, pero ha mejorado 35 respecto al salario medio valenciano y 142 respecto al de Madrid.

Adecco sitúa a Castilla y León en octavo lugar del ranking sobre oportunidades y grado de satisfacción de los trabajadores. Navarra se ha convertido este año en la mejor y Castilla-La Mancha, la peor. Mejor que la Comunidad estarían por este orden Baleares, Madrid, Cantabria, Aragón, Asturias y la Comunidad Valenciana. El resto estaría peor.

Adecco elabora con dieciséis variables este indicador del estado de situación del mercado laboral desde el punto de vista de las personas, utilizando un conjunto de estadísticas oficiales y públicas sobre remuneraciones, seguridad laboral, oportunidades de empleo y desarrollo profesional, conciliación de la vida personal y profesional y conflictividad laboral. Navarra puntúa con un 6,7, Castilla y León con un 5,7 y Castilla-La Mancha con un 4,9.

Trabajar en la industria significa ganar más que en el resto de sectores

La industria tira al alza de los salarios. Un asalariado de este sector gana en la región un 21,4% más que la media, un 23,1% por encima del que trabaja en construcción y un 28,4% sobre el sector servicios, según la Encuesta de CosteLaboral del INE, que recoge datos de enero a marzo. No obstante, este diferencial por sectores varía con respecto a la media nacional, donde es el sector mejor pagado y su diferencia se reduce al 18,3%. El sector servicios retribuye mejor a ss asalariados y la diferencia salarial con la industria se limita al 21,8% y con la construcción al 26,7%. La construcción tiende a una mayor subida; en Castilla y León sus remuneraciones aumentaron un 10% en el último año.