El socio estratégico que acelera pieza a pieza un millón de coches al año

Carrocería, interior, mecánica y equipamiento son los ingredientes para un coche perfecto. Pieza a pieza hasta crear el automóvil ideal. Un puzle en el que participan muchas manos. Una de ellas es Benteler, una empresa familiar que desarrolla, produce y vende productos, sistemas y servicios para el sector del automóvil. A los mandos de este negocio está Roberto Cossío, un ingeniero industrial que entró en la compañía como jefe de producción y mantenimiento y en menos de un año aceptó el reto de llevar la planta palentina a su excelencia operativa como director.

Es el piloto de un negocio que genera riqueza en la provincia y, por ende, fija población. Un bólido de carreras con una plantilla de 130 personas que ha sabido mantenerse y subir en producción, lo que se traduce en una contribución a la mejora del conjunto de la sociedad. Un socio estratégico que en sus más de 23.000 metros cuadrados produce componentes estructurales y de motor. Su saber hacer deja su impronta en alrededor de un millón de coches al año.

A la planta de Venta de Baños, que trabaja en estrecha colaboración con grandes constructores castellanos y leoneses, se suman otras siete con una plantilla que ronda los 2.000 empleados. Fuera de España posee 30.000 trabajadores en 144 ubicaciones en 39 países y las ventas el pasado año ascendieron a 7.856 millones. Sus productos incluyen soluciones para automóviles, módulos para chasis, carrocería, motor y sistemas de escape, así como sistemas para vehículos eléctricos.

La fábrica de Palencia ha recibido el Cecale de Oro 2017, un galardón que pretende destacar la importancia de esta compañía en el medio rural, azotado por la despoblación. Su día a día sirve para bombear una zona llena de vida gracias al establecimiento de familias que trabajan en Benteler. El holding cuenta con tres divisiones comerciales: Benteler Automotive, Benteler Steel/Tube y Benteler Distribution.

Roberto Cossío antes de desembarcar en la empresa palentina trabajó en Renault, Cartif y la Fundación Igenove. Experiencia que junto a su formación –un máster en Prevención y Riesgos Laborales y estudios en energía y medio ambiente, programación de robots, Lean Factory y TPM, además de hablar inglés, francés y alemán– hacen que la compañía siga creciendo y adaptándose a las exigencias del mercado y a las necesidades de los clientes.