India, un invitado de honor
Espacios para el enoturismo, degustaciones gastronómicas y recreaciones históricas conforman las propuestas de ocio para los visitantes de una «cita obligada del sector»
Carnero, Sardón .Ramírez, García Cirac, Asían y Suárez-Quiñones.-
La diversidad de sus contenidos, la capacidad de poner en valor sus recursos y la contribución a la desestacionalización de la oferta turística son tres de las marcas de identidad de una feria pionera en la divulgación del turismo de interior. Intur celebra su vigésimo primer cumpleaños con un invitado de honor: la India.
La declaración de Naciones Unidas del Año Internacional del Turismo Sostenible marcaba la línea argumental de esta edición que busca remarcar el «estratégico papel de la sostenibilidad» en la consolidación de un «posicionamiento duradero y estable en el futuro mercado turístico mundial», tal y como apuntan desde su organización.
En torno a un millar de entidades se citan, hasta el domingo, en la Feria de Valladolid donde se exhiben propuestas de destinos, alojamientos, enoturismo o empresas de innovación en esta materia, entre otras. A las doce comunidades autónomas participantes se unen, en esta edición, países como Japón, Turquía, Nepal, Bután o India proponiendo al viajero descubrir rincones que rebosan de interés.
El trayecto durante el fin de semana se sumergirá en un infinito catálogo de atractivos por explorar, donde el enoturismo concentra la mayor proyección. «Visitar una bodega es solo un aspecto de las innumerables opciones que se desarrollan en torno a la viña, la uva y el vino. Catas, experiencias sensoriales o la divulgación de las facetas culturales y arquitectónicas son algunas de las piezas que completan el puzzle», explican.
La gastronomía, entendida como un «aliciente innegable» a la hora de hablar de turismo de interior, es un punto fuerte de la Comunidad. Los productos típicos de sus nueve provincias adquieren protagonismo en las tapas que se pueden degustar en Intur: morcilla de Burgos, queso del Cerrato, bollo preñao vallisoletano y garbanzos de Fuentesauco son algunos de los platos a los que acompañan vinos de las denominaciones de origen Ribera del Duero, Cigales y Rueda.
Además, entender la historia como el hilo conductor de muchos viajes lleva también a la recreación de épocas pasadas en la piel de El Empecinado, Juana I de Castilla o Fernando III, entre otros. Así, asociaciones de municipios como Nájera y Mojados, entre otros, trasladan a la feria «fragmentos de su historia en forma de cuidadas teatralizaciones». Una iniciativa que se puso en marcha hace ya cuatro ejercicios, fruto de un acuerdo de colaboración entre Intur y la Universidad Europea Miguel de Cervantes.
En estos veinte años, Intur se ha convertido en una «cita obligada del sector» y en el «momento perfecto para presentar nuevas propuestas».