Los muertos en carretera bajan un 13,9% frente a la subida nacional

El número de víctimas mortales por accidentes en las carreteras de Castilla yLeón descendió un 13,9% en 2016, hasta llegar a las 124 personas. Supone 20 víctimas menos que el año anterior. Castilla y León es la segunda comunidad autónoma española que más baja en decesos por accidente de tráfico, sólo por detrás de Cataluña, que disminuyó en 23 hasta las 153 víctimas.

El conjunto nacional, en cambio, registró un incremento del 2,6%, con 29 fallecidos más, hasta los 1.160. De hecho, se incrementaron en diez comunidades autónomas. Sólo siete redujeron la estadística, y en eso siguieron a Cataluña y Castilla yLeón las comunidades de Cantabria, Madrid, País Vasco, Navarra y Canarias.

La interpretación de los datos es bien distinta, sin embargo, si se desglosan por provincias. Así, las noticias son peores si se trata de Burgos, Palencia, Segovia y Soria, donde el número de muertos en carretera se incrementó. Soria registró el mayor aumento del año, un 157%, con once muertos más, al pasar de los 7 de 2015 a los 18 de 2016. Le siguieron Palencia con un incremento del 50%, desde los 6 a los 9; Burgos, del 8,3%, de los 24 a los 26, y Segovia, del 7,7%, de los 13 a los 14.

Por contra, la provincia que registró el mayor descenso fue León, con 19 víctimas menos (el 65,5%); Salamanca, con 5 (41,6%); Valladolid, con 6 menos (31,5%); Ávila, con 4 (26,7%) y Zamora, con 3 (15,8%).

El director general de Tráfico, Gregorio Serrano, presentó ayer el balance de siniestralidad vial de 2016, y lamentó los malos datos. «Más que nunca, tenemos que trabajar para reducir esta lacra. Hay que revisar y adaptar, tras una primera evaluación, la estrategia de seguridad vial y crear un plan de choque que nos permita volver a la tendencia de disminución de accidentes que veníamos observando en los últimos años», afirmó.

Según informó la Dirección General de Tráfico (DGT), la cifra de fallecidos sigue por debajo de los registrados en 1960, primer año en el que se tienen estadísticas, cuando hubo 1.300 muertos, con un escenario de movilidad absolutamente distinto: había sólo un millón de vehículos y en 2016 el parque sobrepasó los 32 millones. También son inferiores al año 1988, cuando se produjo el pico más alto de la gráfica con 5.940 muertos en carretera.

Siguiendo con datos referidos al conjunto nacional, la accidentalidad en carretera se mantiene en el promedio diario de víctimas mortales, que ha pasado de los 11,6 muertos diarios en carretera en 2000 a los 3,2 en 2016. España presenta una tasa de 36 muertos por millón de habitantes, que se sitúa muy por debajo de la media de la Unión Europea, que se encuentra en 52 (con los últimos datos disponibles de 2014-2015). Lo que sitúa a España como uno de los países del mundo con mejores niveles de seguridad vial.

En cuanto a las circunstancias diferenciadoras de la siniestralidad en 2016, según la DGT, destaca un importante aumento de la movilidad, ya que se ha registrado un aumento de 18,6 millones de viajes de largo recorrido por carretera, lo que supone un 5% más (en total 392 millones de viajes).

Representa un incremento acumulado del 10% en los tres últimos años. Además, se constata un mayor envejecimiento del parque en 2016. Los turismos en que viajaban los fallecidos tenían una edad media de 13,6 años; 11,1 las furgonetas y 9,5 las motos.

También se han detectado más infracciones por consumo de drogas ilegales. En 2016 la DGT, a través de la ATGC, realizó hasta noviembre 60.942 pruebas, resultando positivas 23.822 (39%). Respecto del alcohol, se realizaron 4,6 millones de pruebas, resultando positivas 68.852, el 1,5%.